Iberdrola quiere recuperar las pérdidas derivadas de su participación en la OPS que realizó Bankia en julio de 2011. La empresa reclama a Bankia, en la que el Estado controla un 64 %, una cuantía de 12,4 millones de euros, equivalente a las pérdidas sufridas en su inversión en la OPS, que fue de 70 millones.
Iberdrola argumenta en su demanda que tomó esta decisión tras analizar la documentación dispuesta por Bankia en su folleto y, sin embargo, la reformulación de las cuentas en mayo de 2012 reflejó una situación de la entidad bien distinta. La empresa se hizo una “representación errónea de la situación económica y financiera de Bankia y, en consecuencia, de los riesgos de su inversión y de sus previsiones de rentabilidad”, según fuentes cercanas.
Iberdrola ha tomado la decisión de demandar al banco tras una sentencia del Supremo en la que se pone de manifiesto que “el folleto publicitó una situación de solvencia y de existencia de beneficios que resultaron no ser reales”. Tras las salida a Bolsa, compañía eléctrica fue vendiendo títulos de la entidad financiera entre los meses de agosto y diciembre de 2011.
Iberdrola es la primera de las grandes empresas que acudieron a la salida a Bolsa que presenta una demanda contra Bankia. En esta lista figuran entidades como Mapfre, que ha estudiado reclamar; ACS, El Corte Inglés, Santander, CaixaBank, Sabadell, Popular (que también estudió la reclamación), Ferrovial, Grupo Villar Mir y Mutua Madrileña, entre otras.