Uno de los aspectos que está levantando muchas dudas por parte de tanto inquilinos como propietarios en el contrato de alquiler de una vivienda o local comercial es qué ocurriría en el caso de que los rebrotes de coronavirus que se están viviendo en estas semanas den lugar nuevos confinamientos o un estado de alarma que obligue a las personas a cambiar sus rutinas, modos de vida e incluso su lugar de residencia.
A la hora de firmar un alquiler, se deben de tener en cuenta una serie de condiciones y ambas partes deben dedicar el tiempo suficiente a revisar el contrato con detenimiento. Antes de la irrupción de la pandemia de la COVID-19 en el mundo, prácticamente ningún contrato de alquiler incluía ninguna cláusula referente a las condiciones del arrendamiento en el caso de una pandemia, pero hoy en día ese escenario es todo menos descabellado.
Un colectivo especialmente vulnerable a los posibles efectos de una pandemia en cuanto a su alquiler es el de los estudiantes; en concreto, aquellos universitarios que se mudan a otra ciudad para sus estudios y que, de implantarse un nuevo estado de alarma o confinamiento para frenar el virus, probablemente se verían obligados a abandonar de nuevo sus clases y volver a sus respectivos domicilios habituales que tengan fuera del curso académico.
Desde Legálitas confirman que este tipo de cláusulas son legales y el objetivo de llevarlas a cabo es tener claro cómo se actuaría en esta situación hipotética de un nuevo confinamiento y esclarecer el mayor número de dudas al respecto.