Los datos de operaciones de compraventa de vivienda publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) a cierre de 2023, muestran que “el mercado de la vivienda ha resistido mucho mejor de lo esperado el fuerte repunte de la financiación”.
Así lo asegura Beatriz Toribio, secretaria general de la Asociación de Promotores y Constructores de España (APCEspaña), quien afirma que “desde finales de 2022 hemos asistido a diez subidas de tipos de interés y, aun así, cerramos el año mucho mejor de lo esperado. Las cerca de 590.000 operaciones de compraventa superan las previsiones que se hacían hace un año para el ejercicio 2023, que auguraban que la actividad se quedaría en el entorno del medio millón de transacciones”.
Según Toribio, en la comparativa interanual “hay que tener en cuenta que 2022 fue el mejor año a nivel de actividad en el sector residencial desde 2007,” por lo que la desaceleración que muestran los datos se hace mucho más evidente. Por ello, destaca que el nivel de actividad de 2023 en el inmobiliario es similar al de 2021, cuando el INE registró 565.523 operaciones de compraventa.
Uno de los factores que explica esta resistencia de la actividad es la falta de oferta, sobre todo de vivienda nueva. Este segmento, según los datos del INE, tan solo aminoró su actividad en un 4,8% respecto a 2022, un porcentaje muy inferior al 10,8% de la vivienda de segunda mano.
De cara a 2024, la asociación prevé que se haga más evidente la desaceleración de la actividad inmobiliaria en los datos oficiales, como consecuencia del decalaje de estos. “El encarecimiento de la financiación, las tensiones inflacionistas y la subida del precio de la vivienda se harán más evidentes en la demanda de compra de vivienda, si bien una posible bajada de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE) en la segunda mitad del año podría reanimar la actividad”, concluye la secretaria general de APCEspaña.