La producción de hormigón cayó en 2020 un 10,1% respecto a 2019, un dato mejor de lo esperado inicialmente, según el último barómetro realizado por la Asociación Nacional de Fabricantes de Hormigón Preparado (Anefhop)
No obstante, el sector no es optimista respecto a 2021.Debido a la caída del empleo y la consiguiente bajada del poder adquisitivo, este año puede ser peor que el pasado. La patronal tampoco es optimista respecto a la iniciativa pública para facilitar la inversión y no cree que la llegada de los fondos europeos vaya a servir para revertir tendencia a la baja en el sector, aunque sí observa un cambio positivo en cuanto a la previsión de la inversión privada.
Las dos principales preocupaciones para estas empresas siguen siendo la estrategia comercial, la escasez de ofertas y la gestión de las personas ante los contagios. No se contempla, por el contrario, los concursos de acreedores, pues la gran mayoría de los asociados cree que el empleo se mantendrá y que la viabilidad de las empresas no se verá afectada gravemente.
Lo que sí se mantiene es el miedo a las reducciones crediticias, al tiempo que se reduce la preocupación por la falta de cumplimiento de los plazos de pagos de los clientes o la paralización de la obra, según las respuestas facilitadas en el barómetro.