El sector español de la carretera ha presentado un plan para hacer frente a la crisis del COVID-19 que incluye una inversión de 32.000 millones de euros en infraestructuras en los próximos años, que daría empleo a más de un millón de personas de perfiles más vulnerables.
El plan denominado “Carreteras Seguras, Verdes y Conectadas”, que trasladarán en breve a las administraciones, abarca dos ámbitos: el que afecta a las ciudades, con un presupuesto de 7.400 millones para generar 236.000 empleos, y otro interurbano, con un presupuesto de 24.700 millones que emplearía a 800.000 trabajadores.
El presidente de la Asociación Española de la Carretera (AEC), Juan Francisco Lazcano, ha descrito el panorama del sector como muy preocupante y en crisis desde 2010 y ha precisado que el plan que auspicia la AEC es una oportunidad cierta de recuperación económica que puede absorber empleo de los sectores más afectados por la crisis (hostelería, ocio, turismo o comercio).